¿PROTECTORES SOLARES? ¡Sin tóxicos, por favor!
La crema solar es un producto que nos aplicamos por todo el cuerpo y, a menudo, repetidamente a lo largo de una exposición solar duradera. Por ello, es aconsejable leer las etiquetas con suma atención para evitar aplicarnos productos que contienen cantidades importantes de sustancias potencialmente tóxicas y potencialmente (algunas, probadamente), cancerígenas a largo o medio plazo.
Lo primero que nos viene a la mente es buscar protectores solares sin parabenos, pero los famosos parabenos no son la única sustancia nociva que contienen las cremas solares convencionales. Si no quieres marearte leyendo etiquetas, confía en la garantía de los certificados Bio.
No es fácil para los laboratorios conseguir protecciones solares exentas de todo tipo de conservantes sintéticos, sin embargo los esfuerzos por lograr estos productos dan cada día mejores resultados. Como buenos ejemplos tenemos las cremas con certificado Bio de Lavera, Jason o Yipsophilia, o la novedosa Alphanova Sun, que nos ha convencido desde todos los puntos de vista. Os presentamos CUATRO en este post:
- ALPHANOVA. Es nuestra marca preferida. Llevamos tiempo probando diferentes Protectores Solares naturales, y la verdad es que los productos de Alphanova tienen características que otros no poseen. Por ejemplo, no contienen filtros químicos, pero tampoco nanopartículas. Y, lo mejor de todo: no dejan huellas blancas y son fáciles de extender y muy agradables de uso. Alphanova tiene una amplia gama de cremas solares, con distintos factores de protección y diferentes usos y presentaciones. Es de origen francés, elaborada en la Provenza.
- LAVERA. Una crema básica y accesible:De Alemania nos vienen los protectores solares de Lavera, que renovó recientemente algunos de sus productos. Nuestro preferido es el spray protección solar por su comodidad extrema: es fácil de aplicar y cómodo y conveniente, por precio y por uso, para toda la familia. Ahora bien, su SPF es de 20, así que conviene a pieles sin necesidades especiales y ya ligeramente expuestas al sol, pieles de tonos morenos y pieles acostumbradas a las radiaciones solares. En nuestra opinión, pecan de ser demasiado pastosos, y algunas de ellas dejan demasiadas huellas blanquecinas.
- JASON. Un clásico de las cremas solares orgánicas: De Estados Unidos tenemos los protectores solares de Jason. Todo un clásico es la Protector Solar Sun Block SPF 45 en tubo, una versión para adultos y otra para niños. Siempre con la confianza que proporciona esta marca californiana que tiene una larguísima tradición en cosmética certificada Bio. Sin embargo, no es una crema apta para puristas: a pesar del certificado de la USDA (no de los más exigentes), su INCI deja bastante que desear, pues contiene algún filtro químicos.
- YIPSOPHILIA. De los campos de Navarra procede el protector solar de Yipsophilia, una marca exquisita y una de nuestras marcas preferidas (de los mismos laboratorios que elaboran los productos de Dulkamara Bamboo). La Crema Base Protección Solar F6 de Yipsophilia tiene un índice de protección bajo y conviene a las pieles sensibles y exigentes con necesidades especiales que, además de protección solar ligera, desean un intenso cuidado de la piel. La protección FP6 es básica, de modo que hay que repetir la aplicación muy a menudo. Al igual que las anteriores, está avalada por un certificada Bio: El CPAEN certifica tanto el origen ecológico de sus materias primas vegetales como la actividad de esta marca, respetuosa con la naturaleza.